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Emprendedores

Emprender en grupo: qué tener en cuenta al elegir socios para tu negocio

Por 28 noviembre, 2017Sin comentarios

cómo elegir bien los socios de tu empresa

Las posibilidades de que tu empresa fracase si emprendes con amigos aumentan casi un 30%. Contundente la conclusión a la que ha llegado Noam Wasserman, autor del libro ‘Los dilemas del fundador’ e investigador de la Harvard Business School. Ese alto índice de fracaso contrasta con otro dato a tener en cuenta: el 40% de las startups incluyen amigos en sus equipos directivos… ¿Qué sucede entonces? ¿Qué debería tenerse realmente en cuenta a la hora de elegir compañeros de viaje en el camino del emprendimiento?

En este post os presentamos algunos de los aspectos clave que facilitarán la trayectoria de tu negocio.

Motivos para asociarte que realmente merezcan la pena

Son varias las razones que hacen que sea interesante contar con una segunda –o tercera– cabeza pensante para impulsar un proyecto. Probablemente este sea uno de los motivos que menos llevan a buscar un socio pero es de los que más debería pesar. No piensan lo mismo uno que dos o dos que tres. Tampoco ven lo mismo dos ojos que cuatro. Otro aspecto es el encontrar un profesional con el que conectes y que consideres que va en línea con tu pensamiento y filosofía y que podría aportar mucho a tu idea. Cuéntale que te ronda la cabeza –cuidado con darle todo lujo de detalles vaya que te robe la idea, ¿eh?– y a ver qué te comenta y cómo valoras lo que podría sumarte.

socios con valores

Otro punto a favor de unirte a alguien es el tema económico. La entrada de un socio capitalista es fundamental, sobre todo en determinadas fases de la compañía, cuando se necesita un chute de inversión para sobrevivir o para seguir creciendo. En estos casos es importante dejar muy claro el papel de cada parte en la empresa, tal y como veremos más adelante. Todo por escrito. Siempre.

Compartir visión y valores

No basta con tener en común determinados hobbies o que todos queráis llegar muy alto. Es fundamental que los miembros del grupo –seáis dos, tres…– compartáis la misma visión de la empresa y los valores, saber hasta dónde llegaríais, hasta dónde no, qué estáis dispuestos a hacer, que entre vosotros fluya el diálogo y haya confianza, presentar una idea similar en relación a aspectos tan importantes como la política de inversión, las estrategias de crecimiento, cómo gestionar los recursos humanos, etc. Para ello serán necesarias muchas reuniones previas, horas y horas de charla para conoceros profundamente si es que no sois personas de confianza.

socios por motivos

Todo por escrito

Te hayas aliado con tu mejor amigo o hasta con un familiar, jamás des por supuesta la confianza y la buena fe de la otra parte. Siempre debe haber un contrato de por medio, escrito y firmado, donde se detallen derechos, obligaciones y el papel de cada uno. En estos casos merecerá la pena recurrir a un abogado especializado en la materia para asesoraros lo mejor posible. La suposición de deberes y eximentes acarrea numerosos problemas así que una manera de evitar esto es crear una sociedad limitada (S.L.), donde cada socio es responsable solo de sus acciones y obligaciones, no de las del otro.

En el plan de negocio y en el documento legal debe figurar también cómo se llevaría a cabo la salida de una de las partes e incluso la disolución total del negocio.

socios con abogado

Siempre hay que dejar claro quién es el que manda

Las sociedades al 50-50 en lo que a control se refiere no van a buen puerto. Es imprescindible decidir quién será el director estratégico de la compañía. Se recomienda dividir los negocios en partes desiguales respecto a poder y responsabilidades: 60-40, 70-30… Lo que se estime justo según lo que aporta cada uno al proyecto.

socios con superior