El Marketing de guerrilla es una estrategia de marketing basada en un concepto esencial: la creatividad. En Comunicae te contamos como aplicar esta técnica.
Se trata de una técnica que utiliza acciones publicitarias originales, sorprendentes o polémicas para llamar la atención del público. Como decimos, lo esencial es la creatividad: cuando más original sea el marketing de guerrilla, más ruido generará.
Qué es el marketing de guerrilla
Seguro que has visto un cartel divertido en un panel publicitario, un grafiti original, actores o actrices bailando en un flashmob o incluso personas celebrando, vendiendo u ofreciendo muestras enfrente de una tienda. Todo esto es marketing de guerrilla. Acciones que se hacen normalmente en público para llamar la atención de la gente y generar una reacción.
El marketing de guerrilla suele hacerse en público para llamar la atención de la gente y generar una reacción
La ventaja del marketing de guerrilla es que llama la atención sobre tu marca. Además, la mayor parte de las veces suelen ser acciones originales y divertidas, por lo que la imagen que genera tu marca suele ser positiva.
Por otro lado, no es necesario gastarse un gran presupuesto en una acción de marketing de guerrilla para que sea efectiva y se hable de ello. Por ejemplo, un empapelado bien situado puede alcanzar a mucho público.
¿La desventaja? Hay que ser creativo. Una acción de este tipo puede quedarse en nada si no se piensa bien en el púbico que lo va a ver o si no se ha evaluado bien. O peor: puede haber efecto rebote y a la gente no le hará ninguna gracia lo que haga tu marca, proporcionándote una imagen negativa.
Características principales del marketing de guerrilla
Impacta
El objetivo de esta estrategia es quedarte en la mente del público y crear una reacción por su parte. Si no va a alcanzar esa meta, es mejor repensarla.
En público
Este tipo de acciones se hacen en público: no importa si es en exterior o en eventos, se trata de alcanzar al máximo de personas que puedan ser nuestro público objetivo. Como decimos, es esencial llamar la atención.
Acciones inmediatas
Las acciones de marketing de guerrilla tienen un efecto parecido al de los contenidos virales: la idea es que causen jaleo durante un tiempo y que dejen una sensación (positiva, si es posible) en los usuarios. Si se hace de forma correcta, se logrará que el público llegue a realizar una acción (hablar de ello, comprar, seguir en redes sociales).
En línea con la marca
Como siempre, no hay que olvidar que cualquier acción, sea del plan que sea, debe seguir las indicaciones generales del plan de comunicación de la marca.
Por ejemplo, a Netflix le pega poner un cartel gigantesco haciendo un chiste sobre drogas para una de sus series estrella. Sin embargo, ¿podría hacer lo mismo una marca como Nike? No, la idea no es imitar otras campañas, es crear tu propia esencia publicitaria.
(imagen narcos vs imagen vídeo fight like a girl nike)
Poco presupuesto
Existen acciones que de forma sencilla pueden generar un gran impacto. Aun así, es normal que las grandes marcas sean las que cuenten con el presupuesto para grandes creatividades.
Creatividad
Por último, la creatividad es la característica principal del marketing de guerrilla. Una campaña poco original no se clasifica como marketing de guerrilla: se queda en campaña publicitaria. Si quieres explorar esta estrategia es hora de ponerse con el brainstorming.
Ejemplos de marketing de guerrilla
El animado: los Flashmob
No queríamos empezar sin mencionar a una de las acciones de marketing de guerrilla más comunes y divertidas. Los flashmobs son eventos en los que un grupo de personas fingen bailar de forma improvisada de forma cordinada en un espacio público.
Seguro que habéis visto unos cuantos, así que os dejamos uno un poco diferente:
El grande: El cartel de Netflix para Narcos
Lo hemos mencionado antes y no podía quedarse fuera de los ejemplos. Netflix decidió plantar este enorme cartel publicitario de unos 300 metros cuadrados en la Puerta del Sol, en pleno centro de Madrid. El chiste de la pancarta (una genialidad o pasado de vueltas, según a quién le preguntes) se hizo tan viral que hasta el Gobierno de Colombia pidió que lo retirasen.
Buen gusto o no, es cierto que consiguió un impacto y una reacción enormes. Puro marketing de guerrilla.
El responsable: Nike en cubos de basura
Este ejemplo es especialmente bueno por dos motivos. No solo es llamativo y creativo, también cuenta con la interacción del público y además tiene un factor medioambiental en cuenta.
El oficial: un cachalote encallado en Madrid
Se trata de una acción que puso en marcha el propio Ayuntamiento de Madrid para dar visibilidad a su campaña contra el cambio climático. Fue original e incluso contrataron actores que parecían estudiar el espécimen (de mentira). Además, todo por una buena causa.
El divertido: dientes en una farola
Este es un ejemplo para demostrar que no hace falta contratar una pancarta o poner un cachalote de mentira a tamaño real. Una acción tan sencilla y original como esta no solo divierte al público, también puede conseguir una acción directa.
El de guerrilla: La Niña sin miedo frente al toro de Wall Street
De un día para otro, esta estatua apareció enfrente del famoso Toro de Wall Street. La idea fue de una empresa State Street Global Advisors, que quería destacar su financiación a empresas especialmente lideradas por mujeres.
Lo curioso de esta acción es que el Toro de Wall Street también fue una estrategia de marketing de guerrilla del artista Arturo Di Modica en el año 1989 (artista que, por cierto, no está nada contento de que la niña esté allí, a pesar de haber aparecido de la misma forma que el toro).
Una acción pensada en profundidad y definitivamente impactante.
El original: las patatas fritas en el paso de cebra
Terminamos con un clásico: la pintura de las patatas fritas del McDonalds en un paso de cebra. Es uno de los ejemplos clásicos de Marketing de Guerrilla, ya que lo cumple todo. Es original, creativo, impacta, divierte y además no cuesta apenas dinero.
Si buscas en internet «marketing de guerrilla», verás muchas ideas relacionadas con los pasos de cebra.
En definitiva…
El marketing de guerrilla es una herramienta muy útil para generar impacto en el público. Es una gran estrategia para grandes y pequeñas marcas por igual, y es factible con presupuestos de todo tipo.
¿Qué opinas de este tipo de acciones? ¿Cuál es tu favorita? ¡Cuéntanos en los comentarios!
